28 jul 2022
Alejandra Estefanía Lorenzo Valdés
Estudiante de Relaciones Internacionales del Tec de Monterrey y voluntaria en Global Thought
Uno de los grandes problemas que tiene que atender en particular la Octava reunión Bienal de Estados para Considerar la Implementación del Programa de Acción para Prevenir, Combatir y Erradicar el Tráfico Ilícito de Armas Pequeñas y Ligeras en Todos sus Usos (UNPoA) es la construcción de resultados de género con base en la RevCon3 (Tercera Conferencia de para revisar el progreso realizado en la implementación del UNPoA ) y en la Séptima reunión Bienal (BMS7), además de, al mismo tiempo, garantizar la inclusión de otros grupos tradicionalmente subrepresentados como sobrevivientes, jóvenes y aquellas poblaciones que se pueden estar en mayor riesgo de vulnerabilidad por los efectos de la violencia armada.
Cuando se aprobó el UNPoA en 2001, éste prestó poca atención a las comunidades afectadas (las cuales suelen ser grupos tradicionalmente subrepresentados). Para empezar, los términos “género”, “jóvenes” y “sobrevivientes” no fueron incluidos en el documento oficial.
Particularmente, la pertinencia de la aplicación de los conceptos en contextos muy limitados, por ejemplo: las mujeres solo se mencionaron en el párrafo que mostraba preocupación de las consecuencias del tráfico ilícito de armas pequeñas y ligeras: “(...)Profundamente preocupados por los efectos negativos que tiene para las mujeres y los ancianos” (UNPoA,2001). [1]
Si bien, a pesar de que se reconoce de forma explícita que hay efectos negativos de las armas sobre las mujeres, la mención no es suficiente ya que no explica cuáles son estos daños, cómo podrán repararlos y cómo estos les impiden vivir plenamente. Tampoco menciona la importancia de la participación femenina durante la planeación del programa ni como el sector femenino podía contribuir en materia de género respecto a la creación de estrategias de seguridad y combate contra estas armas.
Independientemente de los factores internos y del contexto el que se vive o la causa instantánea de la violencia, la presencia de armas pequeñas tiene un mismo efecto: más armas pequeñas significan mayor riesgo para las mujeres y es urgente que los Estados reconozcan incluirlos en sus agendas de combate contra el tráfico ilícito de armas pequeñas y ligeras.
Por otro lado, únicamente encontramos dos referencias sobre las infancias y sus necesidades especiales cuando son afectadas por los conflictos armados. Los fragmentos son: “Preocupados por sus consecuencias devastadoras para los niños, muchos de los cuales son víctimas de conflictos armados o son obligados a alistarse como soldados”[2] y “Es necesario satisfacer las necesidades especiales de los niños afectados por conflictos armados, en particular la reunificación con sus familias, su reinserción en la sociedad civil y su oportuna rehabilitación”. [3]
Sin embargo, a diferencia de la mención sobre las mujeres, en el caso de las infancias es posible observar cómo se explica de manera ligeramente más amplia las formas en las que la niñez se ve afectada, resaltando el problema de la militarización infantil, cómo poder reparar el daño y dar un seguimiento de rehabilitación tras haber sido testigos y/o partícipes de un conflicto armado. Pero, olvida cómo concientizarlos de los peligros de las Armas Pequeñas y Ligeras (APLS) y cómo estos pueden usar su voz mediante su participación en la sociedad para vivir una vida libre de violencia.
Además, específicamente con relación a "las víctimas" y la pertinencia del Programa de Acción, se hace referencia a ellas en el último párrafo, como parte de las consecuencias del tráfico ilícito de armas: “el tráfico ilícito de armas pequeñas y ligeras en todos sus aspectos obstaculiza la prestación de asistencia humanitaria a las víctimas de los conflictos armados(...).[4]
Esta única mención no es suficiente, ya que no aborda de forma más profunda al respecto de quienes pueden ser los más afectados por estos conflictos más allá de las mujeres, infantes y adultos mayores, olvida considerar factores como la etnicidad y la condición social y carece de mencionar de qué manera los planes de acción medirán el estado de bienestar que tengan las víctimas una vez finalicen los conflictos armados. Tampoco los invita a usar su voz para concienciar al resto de la población en diferentes zonas, sobre todo aquellas donde existan altos índices de violencia. Otro aspecto que destaca es que las referencias son hechas únicamente bajo lo que se considera un marco más limitado, el de “conflicto armado” y no a la “violencia armada”, excluyendo por tanto a un gran número de personas que se ven afectadas por estas armas.
Al respecto, cabe mencionar que la violencia armada se puede definir como el uso intencional de armas, (ya sea la amenaza de usarlas o la activación de estas) con el fin de infligir muerte, provocar heridos o daño psicológico que impide la seguridad de un Estado y el desarrollo de sus comunidades, en especial las que han sido históricamente subrepresentadas. Mientras que un conflicto armado, sí es un enfrentamiento entre dos grupos humanos de tamaño masivo (que pueden ser Estados, o grupos armados no estatales) con resultados de pérdidas materiales y humanas.
Por lo anterior, entre más se excluyan a estos sectores en cuanto a la implementación del UNPoA, los Estados tendrán un panorama incompleto sobre los daños que propicia el tráfico ilícito de APLs en cada grupo social; propiciarán resoluciones sesgadas en cuanto al combate de estas armas; y contribuirá a crear una inestabilidad política que hará que estos sectores migren desesperadamente buscando una reinserción social segura en algún otro lado. Lo anterior lleva a otro problema que no se ha considerado lo suficiente: la migración masiva. Invisibilizar y/o minimizar las experiencias y voces de estos grupos hace que el comercio ilícito de APLs exista y sea una amenaza mayor que atenta contra la seguridad en el sistema internacional.
Es importante que la implementación del UNPoA no sólo se limite a mencionar las bajas materiales y humanas, sino mostrar el daño a nivel social que la violencia armada deja a su alrededor, tomando en cuenta a los grupos que han sido históricamente subrepresentados como las mujeres, infancias y juventudes, indígenas y etnias por mencionar algunos ejemplos.
Los Estados deben de expandir sus estrategias contra la violencia armada, como crear programas de recuperación para las víctimas (con seguimientos constantes incluidos), evitar que las juventudes sean partícipes de futuras agresiones armadas, fomentar la idea de la cooperación Estado-sociedad para frenar el tráfico de APLs, además de reforzar lo estipulado en la BMS8 respecto al rastreo de armas y la colaboración entre países para frenar el comercio ilícito de APLs. Todo lo anterior, con el objetivo de tener Estados más seguros y donde todos los integrantes puedan desarrollarse plenamente.
En los últimos años, se han visibilizado los esfuerzos realizados desde las representaciones diplomáticas, para no solo incluir la participación de la sociedad civil organizada, sino ir un paso más allá e incluir a personas de grupos tradicionalmente subrepresentados dentro de sus delegacionesdurante el proceso de toma de decisiones en la implementación del UNPoA. Sin embargo, aún se debe enfrentar a la creencia errónea por parte de algunos Estados de que estos temas son de alguna manera “secundarios” a la implementación del UNPoA, por lo que sí es necesario garantizar que los procesos de revisión y de creación de estrategias sean sensibles al género, con respeto pleno de los derechos humanos y con un enfoque particular en los sectores más pobres, en condiciones de vulnerabilidad y a los más rezagados.
Ante tales circunstancias, la International Action Network on Small Arms (IANSA) sugirió que los Estados tuvieran en mente algunas consideraciones dentro de las próximas sesiones de diálogo del BMS8 :
- Reafirmar y aplicar sus compromisos con la participación igualitaria, plena y efectiva de las mujeres a nivel comunitario, nacional, regional y mundial.
- Incluir las voces de jóvenes y sobrevivientes en sus delegaciones durante la BMS8 y RevCon 4.
- Que al menos la mitad de sus declaraciones en BMS8 y RevCon4 sean pronunciadas por oradores que no se identifican como hombres, al mismo tiempo de asegurar de que los miembros de los grupos subrepresentados sean participantes plenos y efectivos en estas reuniones.
- Recopilar datos que reflejen los impactos sobre el comercio ilícito de APLs por sexo y grupo de edad y destinar apoyo en cualquier modo hacia la investigación sobre los efectos de ese comercio sobre el género
- Aumentar su atención a otros grupos en condiciones de vulnerabilidad tradicionalmente subrepresentados y sectores de la sociedad más afectados por la violencia ocasionada por las APLS.
Un punto muy importante de mencionar es que, aunque las APLs puedan no ser la causa de la violencia, éstas multiplican el daño que se ejerce hacia las poblaciones en gran medida. Son baratas, fáciles de transportar y ocultar, además de tener mecanismos sencillos de uso. El tráfico y comercio ilícito de las APLs representa mayores daños socio-económicos, sobre todo a aquellos grupos que históricamente han sido subrepresentados por sus sociedades y que sin su consideración, los planes de combate han sido no lo suficientemente impactantes y por lo tanto, el problema siga creciendo anualmente.
Finalmente, es importante referir que hoy en día existen nuevas y complejas amenazas que exigen la responsabilidad de los Estados en garantizar la seguridad de todos los integrantes que conforman sus sociedades y crear respuestas eficaces que consideren factores como el género, los grupos de edad, las etnias y donde exista una mayor colaboración entre los Estados, el sector privado y la sociedad civil. Al mismo tiempo, fomentar la cooperación entre países para frenar la violencia armada y los conflictos armados mediante la implementación de programas como el UNPoA.
Referencias:
ACNUR en Español, A. C. (2018,). Conflicto armado: ¿qué es, según el Derecho Internacional Humanitario? ACNUR. https://eacnur.org/blog/que-es-un-conflicto-armado-segun-el-derecho-internacional-humanitario-tc_alt45664n_o_pstn_o_pst/
Amnistia Internacional.(2005). Los efectos de las armas en la vida de las mujeres [contraportada] Violencia contra las mujeres. Amnesty.org https://www.amnesty.org/es/wp-content/uploads/sites/4/2021/08/act300012005es.pdf
Callsen, E. (2022). Six key issues for the Eighth Biennial Meeting of States (BMS8) on the UN Programme of Action (June 2022). IANSA. https://iansa.org/six-key-issues-for-the-eighth-biennial-meeting-of-states-bms8-on-the-un-programme-of-action-june-2022/
Callsen, E. (2018). Third Review Conference on the Programme of Action (RevCon3). IANSA. https://iansa.org/third-review-conference-revcon3/
Declaración de Ginebra. (2008). La Declaración de Ginebra sobre Violencia Armada. Genevadeclaration.org. http://www.genevadeclaration.org/fileadmin/docs/newsletter/Geneva-Declaration-Newsletter-03-Spanish.pdf
Internacional, A., de Acción sobre Armas Pequeñas, R. I., & Oxfam. (2005). Los efectos de las armas en la vida de las mujeres. Editorial Amnistía Internacional.
Naciones Unidas. (2001).Informe de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Tráfico Ilícito de Armas Pequeñas y Ligeras en Todos sus Aspectos. Naciones Unidas: https://documents-dds-ny.un.org/doc/UNDOC/GEN/N01/507/23/PDF/N0150723.pdf?OpenElem
UNODA.(2022).Programme of Action on small arms and its International Tracing Instrument. United Nations: https://www.un.org/disarmament/convarms/salw/programme-of-action/
[1] Naciones Unidas. (2001). Informe de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Tráfico Ilícito de Armas Pequeñas y Ligeras en Todos sus Aspectos. Página 6. Párrafo 6. https://documents-dds-ny.un.org/doc/UNDOC/GEN/N01/507/23/PDF/N0150723.pdf?OpenElement [2] Naciones Unidas. (2001). Informe de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Tráfico Ilícito de Armas Pequeñas y Ligeras en Todos sus Aspectos. Página 6. Párrafo 6. https://documents-dds-ny.un.org/doc/UNDOC/GEN/N01/507/23/PDF/N0150723.pdf?OpenElement [3] Naciones Unidas. (2001).Informe de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Tráfico Ilícito de Armas Pequeñas y Ligeras en Todos sus Aspectos. Página 6. Párrafo 5. https://documents-dds-ny.un.org/doc/UNDOC/GEN/N01/507/23/PDF/N0150723.pdf?OpenElem [4] Naciones Unidas. (2001).Informe de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Tráfico Ilícito de Armas Pequeñas y Ligeras en Todos sus Aspectos. Página 6. Párrafo 5. https://documents-dds-ny.un.org/doc/UNDOC/GEN/N01/507/23/PDF/N0150723.pdf?OpenElem