Tras 8 años de pausa, la Unión Europea (UE) y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) retoman contacto durante la cumbre UE-CELAC del lunes y martes (17 y 18 de julio de 2023). La Cumbre reúne a más de 50 jefes de Estado que buscan consolidar el diálogo, cerrar negociaciones y superar diferencias. La agenda destaca diversos temas, pero sobre todo el interés europeo en materias primas y el sector agrícola latinoamericano.
La cumbre entre la UE y la CELAC es la primera desde 2015 y su base es la búsqueda de la UE nuevos socios comerciales a la luz del impulso de China en América Latina y las lecciones aprendidas de su dependencia de Rusia en el sector energético.
El anfitrión de la cumbre, Charles Michel, que representa a los líderes de la UE como presidente del Consejo Europeo, inauguró la primera sesión instando a los delegados a condenar la "guerra ilegal" de Rusia. Sin embargo, el presidente de la CELAC, el primer ministro Ralph Gonsalves de San Vicente y las Granadinas, insistió en que la cumbre no era el lugar para discutir sobre Ucrania y argumentó que la guerra debe terminar negociada aunque "no sea del todo satisfactoria para ambas partes".
Las naciones de América Latina y el Caribe no tienen una posición acordada sobre la guerra de Ucrania, y algunas quieren proteger los lazos con Rusia o buscar un acuerdo de paz de compromiso. Pero si algo tienen en claro es que, en lugar de tratar con Ucrania, algunos delegados de la CELAC presionarán por la implementación del acuerdo comercial UE- Mercosur de 2019, que se ha estancado debido a las preocupaciones europeas sobre la deforestación y la competencia agrícola.
Von der Leyen prometió que Europa invertiría 45.000 millones de euros en la economía latinoamericana bajo el programa Global Gateway, la respuesta de Bruselas al alcance de China "Belt and Road" para las economías en desarrollo.
Está claro que la UE tiene un fuerte interés en las materias primas estratégicas de América Latina porque es una región que cuenta, entre otras cosas, con grandes reservas de litio, pero la UE insiste en que no quiere presentarse como una potencia extractiva, algo en contra que ya advirtieron líderes como Lula da Silva y el argentino Alberto Fernández. Por su parte, la canciller mexicana Alicia Bárcena señaló en su discurso: "No podemos ni queremos mantener el paradigma del centro-periferia. Nos negamos a seguir siendo los proveedores de materias primas críticas y mano de obra de baja calificación con peores salarios. Vemos una excelente ventana de oportunidad para asociarnos en plataformas industriales para crear valor, generar empleo con derechos, con sostenibilidad ambiental".
Así pues, esta Cumbre es una oportunidad para construir una hoja de ruta y un mecanismo permanente de consulta sobre desafíos globales que afectan por igual a ambas regiones, como lo son hoy el cambio climático, la migración irregular o la desigualdad. #UE #CELAC #UECELACSUMMIT
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